Bolgheri Sassicaia

Vino Tinto Cabernet Sauvignon y Cabernet Franc, Bolgheri Sassicaia 2017

En una propiedad que se extiende a lo largo de 2500 hectáreas, hemos optado por seleccionar y plantar viñedos exclusivamente en los terrenos más adecuados, cubriendo sólo una pequeña parte de la superficie total. Una zona única en cuanto a tipo de suelo, microclima y exposición que merece su propia denominación: Bolgheri Sassicaia.

Los suelos sobre los que se asientan los viñedos presentan características orográficas variadas y complejas. Con una fuerte presencia de caliza, presentan zonas ricas en margas y guijarros, así como parcialmente arcillosas. Las instalaciones de producción se encuentran a una altitud media de entre 80 y 400 metros sobre el nivel del mar, con una exposición oeste/suroeste.

Tendencias Climáticas:

2017 fue bastante cálido, pero en muchos aspectos sustancialmente diferente a años anteriores, como 2003 o 2012. El otoño y la primera parte del invierno se caracterizaron por temperaturas frías, afectadas por vientos de tramontana y precipitaciones medias. Estas condiciones permitieron una parada vegetativa, contuvieron las principales plagas de la vid y mantuvieron en equilibrio las reservas hídricas del suelo.
El clima bizarro del inicio de la primavera, con temperaturas ya muy superiores a la media a finales de marzo, condicionó la buena floración, pero también el cuajado de los frutos, lo que se tradujo en racimos más pequeños y menos uvas. El verano continuó con días soleados, temperaturas cálidas y ausencia de lluvias hasta finales de julio. A mediados de agosto, con el inicio de la maduración fenólica de las uvas, la llegada de una perturbación procedente del Atlántico, que trajo lluvia durante 2 o 3 días y provocó un descenso importante de las temperaturas, creó las condiciones ideales para favorecer la finalización de la maduración fenólica de las uvas, en lugar de la maduración técnica.
Las fluctuaciones de las temperaturas diurnas y nocturnas que se produjeron desde mediados de agosto hasta finales de septiembre favorecieron el desarrollo de los aromas primarios y secundarios, y determinaron igualmente el aumento de la acidez, verdaderamente indispensable para dar frescura y elegancia a los mostos.

Vendimia:

La vendimia, totalmente manual, comenzó unos 8 días antes, a partir del 30 de agosto con la recolección de las uvas Cabernet Franc y continuó con la de las Cabernet Sauvignon, primero en las viñas situadas a menor altitud y se completó a finales de septiembre con las situadas en las colinas altas, a unos 360 metros sobre el nivel del mar (viñedo de Castiglioncello y viñedo de Quercione), entre finales de septiembre y principios de octubre.

Fermentación:

Selección de las uvas mediante mesa de selección, para eliminar impurezas y cualquier presencia de millerandage. Prensado y despalillado suave y delicado de las uvas, con cuidado de no romper la integridad de las bayas. La posterior fermentación alcohólica espontánea tuvo lugar en cubas de acero inoxidable a una temperatura controlada de unos 28°/30°C (sin inoculación de levaduras). La maceración duró aproximadamente 11-12 días para el Cabernet Franc y 13-14 días para el Cabernet Sauvignon. Los frecuentes remontados al aire libre y las repetidas operaciones de délestages durante la fermentación alcohólica dieron lugar a mostos elegantes, con buena estructura y excelentes componentes aromáticos. La fermentación maloláctica se completó de forma totalmente natural en cubas de acero a finales de noviembre, tras lo cual el mosto se introdujo en madera.

Crianza:

Una vez finalizada la fermentación maloláctica, el vino se introdujo en barricas de roble francés, y una pequeña parte en roble americano, donde envejeció durante un periodo comprendido entre los 20 y los 25 meses. La duración de la crianza se decide técnicamente en función