El Gourmet Palacio sabe mejor
Saber es poder. Conoce más a fondo la historia
de las sardinas enlatadas y toma nota de los tips para que puedas disfrutarlas al máximo.
La conserva de pescados en lata se remonta hasta el año 1810. Muchas versiones sugieren que Napoleón fue quien ideó esta singular manera de preservar alimentos. La manera tradicional de hacerlo es cubrir los pescados limpios en aceite con una pizca de sal, lo que ayudará a que duren mucho tiempo. Las sardinas enlatadas contienen, además, muchos nutrientes como vitamina D y colesterol bueno.

Tener un par de latas en la despensa te ayudará a salir de cualquier apuro, ya sea para una botana o un platillo más elaborado. Las de la marca Vigilante están hechas con aceite de oliva extra virgen, lo cual las hace especialmente deliciosas. Prepáralas en unas tapas o acompañando una ensalada.